Cada día que pasa las personas estamos perdiendo lo que nos hace ser humanos, los sentimientos y los valores morales que nos distinguen de los animales. Cada persona piensa en si misma como si fuera un objeto, porque es feliz al obtener cada vez más cosas y muchas veces para conseguirlo pasa por encima de los valores y principios que el mismo se ha impuesto como persona de bien. Que tristeza que los seres humanos a los que Dios creo con tanto amor, nos destruyamos unos a otras por nuestro egoísmo por el deseo de dinero y de poder. Todo esto nos lleva muchas veces hacer daño a otras personas.
Nuestra sociedad esta cada vez más corrupta y eso se debe en la falta de amor a nuestros semajentas, nos olvidamos que los mandamientos que Dios. Ama a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a ti mismo y hacemos daño sin deternos a pensar en cuanto dolor causamos.
Muchas veces no entendemos quien es una persona con ética la ética estudia lo bueno y lo malo mientras un ser humano practique más valores morales y menos los valores monetarios, es ético.
Cada día perdemos verdaderos amigos, alejamos a nuestra familia que es la que verdaderamente nos ama por nuestro egoísmo y por nuestra idea erronea de que al tener un poco más de dinero, mejor trabajo, mejores cosas que otras personas somos superiores. Aterricemos no somos superiores al contrario somo inferiores con autoestima baja.
Que diferente seria el mundo y las personas mas felices si practicaramos lo que Jesús enseño cuando estuvo en la tierra sé que es deficil pero no imposible. No necesitamos; de cosas, ni dinero para ser felices; un pasaje de la biblia dice no guardes tesoros en la tierra que se pueden picar, los pueden robar mejor guarda tesoros en el cielo que esos existiran por siempre.
La verdadera felicidad esta dentro del ser humano no fuera de él. Nos pasamos buscando fuera y nunca la vamos a encontrar. Cambiemos nuestra forma de pensar practiquemos lo que Jesús nos enseño, porque por medio de Él podremos llegar a Dios y ser felices. El dio su vida para salvarnos pero nostros cada día con nuestras malas acciones le estamos volviendo a clavar en la cruz, lo estamos escupiendo, hiriendo. Amemos a nuestros semejantes y hagamos el bien, no cambiemos un amigo por dninero, no vendamos un plaza de trabajo, demos las cosas desinteresadamente, no tratemos mal a las personas que estan a nuestro cargo, no envidies lo de los otros, no hables de moral sino la practicas, no juzgues. Casi suena utopico pero debemos intentarlo y lograremos cada día que nuestros hijos hereden un mundo mejor.
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